El recorrido de la carretera que va paralela al Estrecho de Gibraltar, desde la frontera con Ceuta hasta Tánger, atraviesa una zona que tiene un gran valor geológico, geomorfológico, histórico y económico y por tanto es muy interesante a nivel turístico y didáctico. Uno de los puntos a destacar es la montaña de Punta Cires, con la preciosa playa de Dalia al NE y Port Med al SW, construido en la antigua playa de río Rmel.
Destaca por sus capas o estratos subverticales formados por areniscas (ortocuarcitas) y arcillas montmorilloníticas con intercalaciones de lignito, de una edad aproximada de 100-30 m.a. (final del Cretácico inferior- Oligoceno) y que constituyen las llamadas capas alóctonas de Beni Idere y Tisirene.
LEYENDA
Marrón oscuro: flysch de Tisirene
Verde oscuro: flysch de Beni Ider.
Azul: Calizas y dolomías del jebel Musa y el Haouz.
Verde claro (Tge): flysch de Tánger.
Naranja (Nd): areniscas numidienses.
Los materiales de la costa mediterránea pertenecen al Rif interno y son paleozoicos.
Las fuerzas tectónicas originadas por el choque de la placa Africana con la Euroasiática no sólo han arrancado y desplazado estos materiales desde el lugar en donde se formaron, sino que además les han dado la vuelta e invertido, como ponen de manifiesto las huellas de corriente encontradas en los contactos entre dos capas en los cuales se observa también un diaclasado (fracturación) y grietas de desecación que contribuyen a la formación de estructuras redondeadas.
Capas inclinadas de arenisca de la montaña de Punta Cires
Estratos con marcas de corriente fosilizadas
Estratos de la plataforma de abrasión actual con diaclasas y estructuras en forma de bolas.
Playa de Dalia desde lo alto de la montaña de Punta Cires.
Antigua playa del río Rmel donde actualmente está Port Med.
Panorámica de la playa del río Rmel durante las obras del puerto con la montaña de punta Cires al fondo a la izquierda y el jbel Musa a la derecha.
Punta Cires es el lugar más próximo a la costa española (14 km ) y es un buen observatorio para el control del Estrecho de Gibraltar, por lo que en épocas pasadas, sobre todo durante la Segunda Guerra Mundial, se construyeron puestos de vigilancia y de defensa, no sólo en lo alto de la montaña sino también a lo largo del acantilado, ya que existía el temor de que las tropas aliadas pudiesen desembarcar en estas playas; finalmente se eligieron las playas del sur, como la de Mohammedia, porque la ruta de acceso a Argelia y Libia era más fácil a través del corredor de Fés-Taza-Orán que por el Rif.
Sería interesante restaurarlos e incluirlos en un itinerario turístico en el que se destacasen los valores históricos. Estas construcciones defensivas y de vigilancia no sólo están en este lugar, sino a lo largo de toda la costa sobre el Estrecho. El recorrido turístico podría empezar en Ksar Seguer, con la visita a las que hay en esa zona y las ruinas de la fortaleza portuguesa, continuar por las de Punta Cires y acabar en las de Bel Younes, visitando también las ruinas de la factoría ballenera. La inversión para su restauración y accesibilidad no sería demasiado costosa y permitiría diversificar los atractivos turísticos de la región.
Port Med desde lo alto de Punta Cires donde están las ruinas de los antiguos bunkers de vigilancia del Estrecho.
Observatorio camuflado a mitad de ladera.
Dos construcciones de vigilancia en la cima.
Escalera dentro del bunker.
Vista del Estrecho de Gibraltar desde el bunker (al fondo la costa española y Gibraltar).
Hay al menos tres bunkers (uno situado en el patio de un edificio militar y dos situados en la plataforma costera cerca de port Med) cuyas entradas tienen la estructura de la fotografiada. Antes de la construcción de Port Med, las galerías y salas interiores servían de refugio a los emigrantes que esperaban para cruzar el Estrecho, pero ahora están muy vigilados y no se permite acceder a su interior.
La morfología costera es también muy interesante ya que los movimientos tectónicos que invirtieron la serie sedimentaria y añadieron nuevos materiales al continente, han seguido actuando y han levantado la costa con respecto al nivel del mar, de esta manera se han creado acantilados vivos que están siendo erosionados por el oleaje en su base. Esta erosión es visible a lo largo de toda la costa donde aparecen los estratos verticales cortados y semisumergidos creando la llamada “plataforma de abrasión” o elevados por encima del nivel actual del mar, formando las rasas costeras .
Capas cortadas por la erosión del oleaje.
La diferente composición y compactación de las capas rocosas las dota de una mayor o menor resistencia a la erosión del oleaje, lo que crea bellas estructuras como resultado de la erosión diferencial.
Oquedades en forma de "nido de abeja" por la erosión diferencial de la arenisca.
Plantas de limonio sobre el acantilado.
La construcción del Port Med ha modificado completamente la región y sin duda este cambio se acelerará en los próximos años a medida que se vayan construyendo nuevas infraestructuras relacionadas con la actividad portuaria y entre en funcionamiento la zona industrial. Todo esto genera un enorme potencial de riqueza y desarrollo, pero también impactos negativos que hay que minimizar.
Presa sobre el Rmel para evitar la inundación de Port Med. |
Port Med con la montaña de Punta Cires o de Dalia al fondo.
Panorámica del puerto desde la carretera.
Los impactos actuales más importantes están ocasionados por los movimientos de tierra para la realización de las nuevas infraestructuras, como los originados por el trazado de las carreteras y pistas y por la apertura de canteras en las montañas calizas.
Destacan también: la alteración de la dinámica costera y la destrucción del litoral, la presencia de tendidos eléctricos y postes de los aerogeneradores, la construcción de nuevas viviendas diseminadas por doquier, que no ha tenido en consideración las formas de la arquitectura tradicional y ha introducido elementos arquitectónicos en los que, a veces, ha predominado el afán ostentoso sobre los valores estéticos.
Construcciones en Dalia.
Algunas zonas de la costa están muy afectadas por los depósitos de alquitrán procedentes de las mareas negras que originan los vertidos de los petroleros que atraviesan el Estrecho de Gibraltar al limpiar sus tanques en lugares no permitidos o por escapes accidentales de los petroleros y refinerías tanto de Algeciras como de Gibraltar.
Muy interesantes y cientificamente bien documentadas todas tus entradas sobre esta zona del Norte de Marruecos que conozco.
ResponderEliminarPara el desarrollo del turismo rural en el Norte, que desgraciadamente no existe y que buena falta haría, deberian fijarse algunos operadores y tomar como referencias tus articulos.
Saludos: Javier
Sin duda el potencial turístico de la zona es enorme, no solo por sus valores en sí, sino porque por aquí pasan millones de personas durante su viaje hacia el sur, pero habría que convencerles de que merece la pena pararse unos días por estos parajes.
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